martes, 17 de junio de 2014

Actualización sobre mi proyecto de novela y el próximo CampNaNo


Siento mucho haberme demorado tanto en publicar una nueva entrada. A fines de esta semana me voy de vacaciones durante unos días y he estado ocupada dejando listas varias cosas que necesito para poder irme tranquila y disfrutar las vacaciones.


Fuente

En esta entrada quiero hablarles sobre un cambio de planes en relación con los que me había propuesto a inicios de este año.

Tengo claro que quiero terminar una novela completa, pero no quiero hacerlo de cualquier forma, quiero hacerla lo mejor que pueda. Pero como nunca he terminado una novela no sé en realidad cuando tiempo Yo podría necesitar para lograrlo.

En algún momento leí que hay escritores que escriben rápido y luego pasan un montón de tiempo editando; mientras que otros se demoran mucho en terminar un primer borrador, pero lo hacen de forma tan detallada y concienzuda que suelen gastar mucho menos tiempo que los primeros en la revisión y edición a posteriori. No creo que un método sea necesariamente mejor o peor que otro, cada uno tiene sus pros y sus contras y pienso que dependiendo de cada escritor se tendrá mayor o menor afinidad con un método u otro.

Desde finales del 2012 y hasta casi mediados del 2013 estuve probando el método de escribir rápido y, en un plazo de dos meses no-consecutivos, conseguí un poco más de 70.000 palabras del primer borrador de una novela (provisionalmente titulada “Z”). El problema: nunca llegué a considerarlo un borrador completo pues tenía unos huecos y fallas abismales en la mitad. Sé que con este borrador parcial necesito hacer un fuerte proceso de revisión y reescritura, pero como el año pasado, después de escribir 70.000 palabras estaba mentalmente agotada y quería descansar de ese proyecto, me puse a trabajar en el que ahora es mi proyecto actual (“UVELT”) y a inicios de este año intenté retomar en paralelo el trabajo en el anterior, pero la cosa no funcionó. Estoy siguiendo métodos de escritura diferentes con cada uno, y al intentar trabajar en ambos el avance se me estaba haciendo insufriblemente lento y pesado. Así que decidí centrarme este año en el último proyecto que empecé y dejar el otro (el de las 70.000 palabras) para el próximo año (si es que para entonces ya he terminado con el actual o me encuentro en un punto en el que pueda trabajar paralelamente en ambos).


Fuente


Así que de momento (y tal vez por mi tendencia al perfeccionismo), con mi proyecto actual estoy intentando el segundo método (dedicarle más tiempo y esfuerzo al primer borrador y a aspectos relacionados con este). El problema es que, al seguir este método, los planes a mediano plazo no me están funcionando mucho (es decir, no suelo cumplirlos aunque sí avanzo). Por eso, he decidido hacer planes a más corto plazo y monitorear mi avance cada poco tiempo (una vez al mes, en promedio) para así poder saber si voy por buen rumbo o si necesito modificar mis planes o implementar nuevas estrategias.

La cuestión, con mi proyecto actual, es la siguiente:

Hay una serie de eventos que sucedieron mucho antes que lo que narro en la novela que estoy escribiendo. Sin embargo, aunque no los narre, estos hechos tienen una fuerte relación con el presente de la novela pues han influenciado notablemente la situación actual y las relaciones entre algunos personajes muy importantes. Así que quiero tenerlos lo suficientemente claros.

El problema es que no sé muy bien cómo abordar ese pasado. Al inicio tenía una idea vaga de lo que había sucedido, y hace unos días con la ayuda de mi hermana logré tener más claridad respecto a lo que había ocurrido en ese pasado. Pero quiero conocerlo más al detalle, para que se convierta en una base suficientemente sólida en la cual sustentar mi novela y le dé más profundidad.
Algo que me viene dando vueltas por la cabeza es escribir ese pasado a modo de precuela (o algo parecido) y quiero intentarlo. Así que para la escritura de esta “precuela” voy a probar un método que encontré en este blog: http://www.storymind.com/page31.htm


Fuente

 No sé si seguiré este método de cabo a rabo pues, de momento, mi objetivo principal no es escribir la precuela como un libro completo listo para que otros lo lean, sino por lo menos dejar la historia en mi mente (y preferiblemente también por escrito) lo más clara y detallada posible.

Dentro de poco comienza el CampNaNoWriMo de julio. Estoy emocionada ante la perspectiva y junto con Ana Katzen organizamos una cabaña en español (todavía nos queda cupo para un par de compañeros más, así que si les interesa, avísenme ;). Además,  aunque antes he hablado de este evento en mi blog, creo que nunca lo he tratado a profundidad, por lo que, en mi próxima entrada, planeo hablarles con más claridad y detalle sobre el CampNaNoWriMo y de qué se trata).

http://campnanowrimo.org


La cuestión es que, aunque tengo claro el número de palabras que quiero intentar (40.000) durante el mes que dura el campamento, no estoy muy segura si estas palabras deberían ser de la precuela, o de la novela como tal o de ambas. Primero me inclinaba más por una opción y luego por otra, pero creo que hasta que no acabe este mes y vea cuánto he avanzado en el desarrollo de la precuela, no tendré información suficiente para tomar una decisión definitiva. Por lo tanto, mi decisión actual es esperar a fin de mes para definir en qué proyecto trabajaré durante el camp.

Bueno, aquí acaba esta actualización sobre mis planes.

Intentaré mantenerlos informados sobre mis progresos y reflexiones al probar el nuevo método de escritura del que les hablé ;)

¡Nos estamos leyendo!

2 comentarios:

  1. Pues supongo que cualquier proceso es mejor si se esta evaluando constantemente y cambiando cosas para mejorarlo. Ánimo con tus proyectos

    Y que tengas unas lindas vacaciones :)

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. ¡Muchas gracias! :)

      Ya estoy de vuelta de mis vacaciones (por eso me demoré en publicar tu comentario, ¡lo siento!). Necesitaba ese tiempo de descanso y lo disfruté mucho, aunque los primeros días estuve un poco enferma.

      Sí, creo que la retroalimentación constante es algo muy importante y que ayuda mucho a no perder el rumbo o a retomar el camino a tiempo si es que uno se ha desviado.

      ¡Saludos!

      Borrar